Los holders españoles se verán “agobiados” por las nuevas normas de declaración de criptomonedas
Los conocedores de la criptoindustria han respondido a los últimos planes del gobierno español para el sector: un nuevo esfuerzo para hacer que los ciudadanos que tienen monedas en plataformas en el extranjero declaren sus tenencias.
Como se informó anteriormente, un intento de obligar a los españoles con monedas en divisas o en billeteras en el extranjero a declarar sus tenencias descendió al “caos” a principios de este año. El Tesoro y la Agencia Tributaria (el organismo fiscal de España) se vieron obligados a abandonar los planes para hacer que los ciudadanos enumeren sus tenencias de criptomonedas en el tan vilipendiado formulario Modelo 720. Esta última es una declaración de bienes gravables, tales como acciones e inmuebles, que se posean fuera del territorio español.
Pero los errores administrativos parecen haber descarrilado estos planes, y el Tesoro decidió en el último momento permitir que los poseedores de criptomonedas salieran del apuro. Sin embargo, parece que el Tesoro y el organismo fiscal ahora están listos para volver a intentarlo, y han presentado propuestas para un nuevo documento que quieren llamar Modelo 721.
Este nuevo documento, a diferencia de su predecesor, tendría un campo designado para criptoactivos titulado “monedas virtuales ubicadas en el extranjero”. La propuesta del organismo fiscal también sugiere escribir obligaciones de criptodeclaración en el código fiscal del país.
Si el gobierno acepta la propuesta, las declaraciones de monedas retenidas durante 2022 deberán realizarse “entre el 1 de enero y el 31 de marzo de 2023”.
Sin embargo, los comentaristas han coincidido en que la propuesta presenta problemas.
Los posibles errores incluyen el hecho de que los clientes se verían obligados a averiguar por sí mismos si las plataformas de cifrado que utilizan están realmente ubicadas en el extranjero o no.
Muchas plataformas de comercio de criptomonedas afirman estar completamente descentralizadas, lo que significa (al menos en teoría) que no son ni “nacionales” ni “extranjeras” desde la perspectiva de un cliente español. Para aumentar la confusión, Finanzas informó que muchas plataformas están registradas en el Banco central de España, pero en realidad tienen su sede fuera del país. La “carga” de determinar exactamente dónde se basa una empresa de cifrado recaería sobre los ciudadanos individuales, continuó el informe.
Si bien los exchanges españoles más grandes como Criptan y Bit2Me tienen su sede en España, este no es el caso de las plataformas nacionales más pequeñas, algunas de las cuales están ubicadas oficialmente fuera de España.
Javier Castro-Acuña, jefe de negocios de la plataforma comercial Bitnovo, con sede en Valencia, dijo que el nuevo formulario “demuestra una falta de conocimiento del sector [cripto] por parte de quienes lo escribieron”.
Castro-Acuña agregó que el formulario también era una medida “desproporcionada” que, en última instancia, tendría “muy poco significado” para la mayoría de los propietarios de criptomonedas.
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